Hoy, quise escribir nuestro propósito como iglesia, inspirados en Mateo 16:18-19 y otros pasajes bíblicos. La palabra «iglesia» (ekklesía en griego) tiene un significado profundo y legislativo. No se trata solo de un lugar físico o de reuniones dominicales; es mucho más. Es sobre ser agentes de transformación y gobierno según los principios del reino de Dios.
1. La Iglesia como Ente de Transformación
a) Ekklesía – Más que una Reunión: La iglesia en sus orígenes era una asamblea con un rol activo en la sociedad, encargada de dictar leyes y gobernar. Así, nosotros como iglesia debemos ser agentes de cambio, influenciando nuestro entorno con la cultura del reino de Dios.
b) Transformando como lo Hizo Roma: Al igual que Roma transformaba las culturas para que pensaran y actuaran como romanos, nosotros estamos llamados a influenciar a nuestro entorno para que refleje los valores y principios del reino de Dios.
2. La Autoridad y el Propósito de la Iglesia
a) La Revelación a Pedro: Cuando Jesús habló a Pedro sobre edificar su iglesia, se refería a un cuerpo de gobierno espiritual, no a un edificio. La iglesia debe legislar y gobernar espiritualmente, estableciendo en la tierra lo que es en el cielo.
b) Génesis y el Mandato del Hombre: Desde Génesis 1:28, vemos que Dios estableció al hombre para gobernar y dominar sobre la tierra. La iglesia debe llevar adelante este mandato, buscando una transformación y reforma en todas las esferas de la sociedad.
3. El Proceso de Transformación
a) Reforma y Restauración: La reforma implica cambio e innovación, pero antes de que ocurra, debe haber una restauración y, antes de eso, un quebrantamiento. La iglesia debe liderar este proceso, influenciando positivamente al mundo.
b) Participación Activa: La voluntad de Dios es que la iglesia no solo disfrute de revelaciones espirituales, sino que también las comparta activamente, llevando cambio e influencia dondequiera que esté presente.
4. La Autoridad y el Despertar de la Iglesia
a) La Creación Espera la Manifestación de la Iglesia: Según Romanos 8:19-21, la creación misma anhela la manifestación de los hijos de Dios. Estamos llamados a madurar espiritualmente, pasando de ser simplemente «hijos» a ser «hijos en autoridad».
b) Ejerciendo Nuestra Autoridad: En Marcos 16:17-18, Jesús promete que señales milagrosas seguirán a los que creen. Como iglesia, debemos ejercer nuestra autoridad espiritual, estableciendo el reino de Dios en la tierra.
5. Renovación y Autoridad Espiritual
Para ser la ekklesía que la generación clama, debemos renovar nuestra mente y no conformarnos a los patrones de este mundo. Debe haber una transformación interna que se refleje en nuestras acciones y decisiones.
Como jóvenes de la iglesia de Dios, estamos llamados a ser más que asistentes a servicios dominicales. Somos parte de la ekklesía, la asamblea legislativa del cielo en la tierra. Estamos llamados a ejercer nuestra autoridad en Cristo, transformando nuestra sociedad y llevando las realidades del cielo a la tierra.
«Mateo 16:19 – Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos, y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.»
Oración Final: Señor, ayúdanos a comprender y ejercer la autoridad que nos has dado como tu iglesia. Que podamos ser agentes de cambio y transformación, llevando tu luz y verdad a cada rincón de la tierra. Amén.
